Con la victoria de la Selección Española a Cuatro se le ha aparecido la Virgen y van a cerrar el mes reventando en audiencias. Pero sobre todo los más afortunados van a ser los de Visto y oído, el nuevo programa de las tardes que ha pasado de empezar de cero a estrenarse con los actos conmemorativos de la victoria, con lo que luego podrán presumir (y seguro que lo harán), de haber tenido el estreno de programa más espectacular de todos los tiempos.
Los presentadores de Visto y oído, Raquel Sánchez Silva y Joaquín Prat (el hijo, no me seáis macabros), empezarán su andadura a partir de las cinco y media de la tarde en Zona Cuatro. El programa es otro más de reporteros y conexiones, como Está pasando o España Directo, pero ellos dicen que van a ser diferentes, que “en principio” no habrá crónica rosa y que sacarán el “lado humano” de la actualidad. Veremos en qué quedan estas declaraciones de intenciones porque como tengan a alguien en casa de la abuela de Iker Casillas yo cambio de canal inmediatamente.
El estreno del programa, además, contará con el ¿atractivo? de ver cumplir las promesas que los profesionales de Cuatro se han dedicado a hacer a lo largo de la Eurocopa: los de Visto y oído dijeron que se bañarían entre tiburones; los Manolos prometieron despelotarse en la Plaza de Colón; Concha García Campoy amenazó con teñirse de rubio platino; e Iker Jiménez dijo que se subiría a la estatua del Ángel Caído. Contenido de autobombo y, por qué no decirlo, algo ridículo. No me apetece demasiado ver la euforia de los de Cuatro, queriéndose como se quieren y jactándose de haber podido todo el rato. Es que se ponen muy pesados.
Para terminar, os dejo una curiosidad. La señora de la promo de Visto y oído y la de los Pelochos que se van de boda son la misma. Mira que me gusta encontrar estas tonterías.
